Muchos de nosotros hemos escuchado acerca del ozono, una capa gaseosa que nos protege contra los rayos ultravioletas o de algunos beneficios como los filtros de agua en base a ozono, pero muy pocas personas saben acerca de la utilidad de aplicarlo en los hongos de las uñas o de la piel.
Comenzaré por decir que es un gas cuya fórmula química es O3 y es un gran oxidante, ya que se convierte en oxigeno al entrar en contacto con otras células (O2 + O), siendo sus principales objetivos los hongos, bacterias, virus, tejidos muertos y levaduras, este es el fenómeno que observamos en el agua oxigenada pero menos potencializado. La acción del O3 es perfectamente natural y no tiene efectos secundarios como lo antimicóticos.
El uso del Ozono en la medicina viene desde el siglo XIX, pero debido a la falta de equipos especializados para generarlo, se suspendió su uso hasta los años 50 cuando nuevamente entró en auge para purificar agua y ambientes, esterilizar salas de operaciones o material quirúrgico, y terapias médicas entre otros usos diversos.
La ozonoterapia también es efectiva en casos de pie diabético, resultando más rápida que otros tratamientos
La micosis, mejor conocida como los hongos en la piel o en las uñas, desde los tiempos remotos, se ha investigado continuamente, y se han identificado casi 200 tipos diferentes que se encuentran en nuestra piel y uñas.
Se ha determinado que en el área de los pies se encuentra más diversidad, es donde conviven hongos y bacterias que conforman la flora habitual de esta zona. No hay porqué temer, ya que la gran cantidad de microorganismos que viven en nosotros son inofensivos, pero cuidado cuando una de estas especies se multiplica más de lo normal, ahí es cuando comienzan los problemas.
Regularmente llamamos tiña o dermatofitosis a las infecciones superficiales por hongos en pies o uñas y toman este nombre debido a los dermatofitos (hongos saprofitos) que se alimentan de queratina que se produce principalmente en los pies, y van haciendo colonias o distribuyéndose en busca de alimento. Las micosis u hongos que se desarrollan más frecuentemente en los pies son:
• Tricophyton rubrum, (es el más agresivo).
• Tricophyton mentagrophytes
• Epidermophyton floccosum,
Los factores de riesgo que ayudan al desarrollo de la tiña pedís o pie de atleta que se pueden agregar a los que teníamos viviendo en nuestros pies, o pueden ser adquiridos por contagio (áreas húmedas como baños, playas, hoteles) son:
Hiperhidrosis, un exceso de sudor o humedad.
Heridas o rozaduras en la planta del pie.
Utilizar zapatos o calcetines que no transpiren.
Usar los mismos zapatos o calcetines por varios días o largo tiempo
Muchas horas de pie o caminando
(guardias, vendedores, meseros, etc.)
Trabajar en lugares húmedos (zapatos industriales)
Traumatismo constante como los Atletas, maratonistas, deportistas, corredores, etc.
Enfermedades Comprometedoras
(diabetes, mala circulación sanguínea, inmunodeficiencia).
Entre otros muchos factores más, pero los predisponentes básicos, son el calor, la humedad y el roce.
¿por qué proponemos la terapia de Ozono en las enfermedades de la piel y uñas?
Como dijimos al principio, el ozono ha sido reconocido mundialmente como la substancia oxidante y, ésta propiedad le confiere un elevado poder germicida (bactericida, virucida y fungicida) de amplio espectro, lo que le permite a la ozonoterapia ser un valioso instrumento para desinfectar las áreas afectadas en la piel y uñas, de hongos y otros microorganismos. El ozono tiene la capacidad de atravesar la membrana y llegar al citoplasma y alterar las funciones vitales de la célula.
Siempre es conveniente contar con el apoyo de un médico, para recomendar a nuestros pacientes diferentes tratamientos, pero el ozono es uno de los más nobles y efectivos que hoy por hoy se utilizan para este tipo de infecciones micóticas. Estoy a sus órdenes para ampliar el tema en cualquier momento.
Por: Dr. Francisco Martínez Leal
TRAUMATÓLOGO CON ESPECIALIDAD EN PIE Y TOBILLO
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El pie diabético se define como una alteración clínica derivada de una hiperglucemia sostenida en el tiempo derivada de desordenes neuropáticos y vasculares que habiéndose producido un traumatismo se genera infección, ulceración y destrucción de los tejidos zonales.
Onicomicosis:
Siendo las micosis oportunistas es frecuente su presencia en el pie del paciente diabético. Las micosis ungueales (onicomicosis) se deben a la presencia de hongos en las uñas, se estima que un tercio de los diabéticos son potencialmente susceptibles de padecerlas.
Este problema rara vez produce algún síntoma relacionado, como dolor o picor, entre otros.
Se identifica porque las uñas afectadas presentan un aspecto amarillento, así como la aparición de unas manchas blanquecinas a modo de islotes debajo de las mismas (materia orgánica con aspecto de aserrín blanco). En ocasiones se observan surcos longitudinales y pérdida de la transparencia de la uña.
Si se observa alguno de estos síntomas hay que acudir al podólogo para que certifique la enfermedad y prescriba el tratamiento más adecuado.
En el caso de los pacientes diabéticos, la presencia de onicomicosis puede generar complicaciones y comprometer los dedos o pie de no recibir atención y tratamiento oportuno, destaca que 80% de las personas con la infección no se atienden y de ellas 50% desconoce o no cree necesario tener un tratamiento adecuado .
Sintomas:
Cuando cambia la coloración de las uñas de los dedos de los pies , tienden a engrosarse y perder brillo, así como generar dolor y molestias, se producen por alteraciones del apoyo, disminución de la circulación, mal cortado de las uñas, y la híper glucemia, podría tratarse de onicomicosis, un padecimiento de origen infeccioso causado por hongos (dermatofitos).
Especialistas advierten que uno de cada diez pacientes presenta este problema, pero por vergüenza social no piden ayuda a un podólogo, por lo que recurren a “productos milagro” o remedios caseros que perpetúan el padecimiento, así como el mal olor, comezón y/o dolor al caminar, entre otros. La gente percibe este tipo de infecciones como estéticas, a pesar de que puede causar una reducción en la calidad de vida emocional, social y laboral.
Educación para la salud
Implementar medidas para disminuir factores de riesgo.
Enseñar el cuidado de los pies.
Asesoría genética.
Enterar a la población la importancia de la detección oportuna.
Informar los factores de riesgo de la diabetes y sus complicaciones para incrementar las medidas preventivas.
BIBLIOGRAFÍA
Fermín R. Martínez de Jesús, “Pie Diabético”, Atención Integral, Segunda Edición, MCGRAW HILL INTERAMERICANA EDITORES, S.A. DE C.V. 2014
Andrew J.M. Boulton, Peter R. Cavanagh, Gerry Rayman, “Pie Diabético”, México, EDITORIAL EL MANUAL MODERNO, S.A. DE C.V. 2007.