Todas las personas, en algún momento de nuestras vidas, tenemos un sueño o proyecto especial con una meta por alcanzar, que sabemos que nos ayudará a realizarnos como seres humanos y profesionalmente.
Con el tiempo lo vamos planeando paso a paso en nuestra mente y sabemos que necesitamos tiempo para lograrlo, para que todo salga bien.
El problema es cuando empezamos a desesperarnos, porque sentimos que tarda demasiado y sentimos que nuestra paciencia se agota.
Esto me recuerda el caso de la oruga
Una niña encontró una oruga en un árbol cerca de su casa, y empezó a visitarla todos los días. Le llevaba hojitas para alimentarla, hasta que la oruga subió a una rama y empezó a transformarse, la niña estaba ansiosa porque quería ver la mariposa.
Un día un orificio apareció en el capullo, y la mariposa luchaba por salir, se veía desesperada porque a pesar del esfuerzo no lo lograba. La niña preocupada fue por unas tijeras para ayudarla, pero cuando iba a cortar un poco, su papá la alcanzó y le dijo: no, no hagas eso. Porqué? Preguntó ella. Porque así es la naturaleza, le contestó él. Entre más batalle la mariposa, sus alas serán más fuertes.
Las luchas son parte de nuestros sueños y nos preparan para lo que viene, tal vez las cosas no salgan como esperábamos, pero fortalecerán nuestras habilidades para intentarlo de nuevo.
¡Seamos Pacientes!
Fuente: http://notigram.com/reflexiones/2016/12/17/las-alas-de-la-mariposa/